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Conjunto de la plaza

Otxandio - Espacios urbanos

El espacio de la actual Plaza Nagusia de Otxandio acoge una interesante serie de construcciones de interés. El primero es el Palacio Consistorial, una de las casas de ayuntamiento más importantes de Bizkaia, elemento señero del Barroco contenido y poco ornamentado, del cual se desconoce el nombre del arquitecto que lo diseñara hacia el año 1736. El frontón, magnífico elemento que, además de bien conservado, mantiene todo el encanto de los espacios deportivos al aire libre que promovían los espíritus ilustrados del siglo XIX. Es obra del arquitecto arratiano Cristóbal de Bernaola , de en torno a 1857. El Paseu-leku es otro excelente ejemplo para reflexionar sobre las buenas costumbres que la Ilustración propone a los ciudadanos. Concebido como zona de paseo y bolera, destaca en él la noble secuencia de columnas pétreas. Data del año 1861. Por último, la Fuente de Vulcano, es un pilar de sillería sobre el que se ubica una estatua erguida de Vulcano, en piedra.

 

Créditos

Texto: Jose Ángel Barrio Loza Fotografía: Miguel Gómez Cambronero

Acceso

La plaza se encuentra en pleno casco histórico de Otxandio.

Horario

Los elementos son visibles desde el exterior.

Localización

Plaza Nagusia.

Información

Las fundaciones de villas que hacen a mediados del siglo XIII los señores de Bizkaia suelen ser fruto de decisiones meditadas, y que tienen que ver con la fijación de población en parajes estratégicos de la geografía regional. En el caso de Otxandio, se trataba de consolidar uno de los varios pasos entre Álava y la costa cantábrica. La fecha precisa se desconoce, pero ronda las últimas décadas de la primera mitad de la centuria señalada.

El núcleo se conformaría apoyado en un viejo camino: una larga calle -Artekale- que se prolonga por dos arrables lineales -Uribarrena y Urigoiena-, flanqueda por casas, con una iglesia monumental, también alineada y en la dirección a Vitoria. Pasto varias veces de las llamas, bien por causa de las guerras, o por incendios producidos en las fraguas, durante siglos el espacio delante de esta iglesia debió de permanecer yermo hasta que, con el transcurso del tiempo, fue poblándose de edificios, que son los que hoy constituyen la Plaza Nagusia.

El primer elemento de interés es el Palacio Consistorial , una de las casas de ayuntamiento más importantes de Bizkaia. Edificio barroco, ofrece una generosa fachada dispuesta en dos plantas. Trabajadas ambas en sillería en lo que constituye la fachada, en la baja se formula un soportal de cinco arcadas hacia la plaza y otras dos a la calles laterales. En el piso, de manera bastante regularizada, se abren cinco balcones, los laterales con antepechos de forja individualizados y los otros tres acogidos a la sala, asomados a una balconada. Entre unos y otros aparecen tres escudos de armas: de España al centro, y de Bizkaia y Otxandio a los lados. Además, en la parte izquierda según se mira, hay un reloj de sol con la inscripción: DIES NOSTRI SICUT UMBRA TRANSEUNT (Nuestros días pasan como la sombra).

Con toda justicia, el edificio de ayuntamiento de Otxandio resulta uno de los más tópicos y divulgados de Bizkaia, elemento señero del Barroco contenido y poco ornamentado, de gran rendimiento urbano. No se conoce al arquitecto que lo diseñara hacia el año 1736.

Frente a él se extiende el frontón , con frontis, pared izquierda y canapés de piedra de sillería. Es un magnífico elemento que, además de bien conservado, mantiene todo el encanto de los espacios deportivos al aire libre que promovían los espíritus ilustrados del siglo XIX. También lo debían de ser los regidores de Otxandio que ofertaron en 1857 su remodelación al arquitecto arratiano Cristóbal de Bernaola, considerando que el juego de pelota viejo no era cancha suficiente para pelotaris de mérito.

Paralelo al frontón se desarrolla un largo soportal, pensado para paseo en la planta que está a nivel de la plaza, y para bolera en la que hay debajo. Por Paseu-leku conocen algunos en Otxandio a este soportal, excelente ejemplo para reflexionar sobre las buenas costumbres que la Ilustración propone a los ciudadanos. Por esto es ya de por sí interesante, pero también lo es en el aspecto artístico porque el tejado, a tejavana, calza en una noble secuencia de columnas pétreas. Data del año 1861 y ahora mismo es espacio destinado a funciones muy diversas, como cabe suponer en un lugar tan céntrico.

Modernamente ha sido demasiado restaurada la Fuente de Vulcano , que aparece exenta en medio de la plaza. En esquema, es un pilar de sillería sobre el que se ubica una estatua erguida de Vulcano, en piedra. La dedicación a ese dios no puede ser menos razonable si tenemos en cuenta que, precisamente en las fechas en que se construye, estaba en pronunciado declive la transformación del hierro en las fraguas de Otxandio. Se debió de encargar al arquitecto de Vitoria Martín de Saracíbar porque, cambiada la escultura de Vulcano por el Neptuno, el proyecto es el mismo que el rechazado en Areatza en 1851.

Por la propia evocación del dios del fuego es ya objeto de interés, porque encarna en lo más profundo de la tradición local de Otxandio, población dedicada casi en exclusividad durante siglos a la forja de clavazón en las fraguas. Y por lo que al proyecto se refiere, parece claro que Saracíbar se inspira en fuentes que había conocido en Madrid y que trasplanta, en un ejercicio de audacia, a estos alejados parajes de Bizkaia.
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